jueves, 11 de junio de 2009

11 J


Tenía miedo a que llegara el día de hoy, como las últimas cuatro veces, creo que nunca me curaré.
Sobevivir, sobrevivimos todos, sonreimos de forma automática, intentamos disfrutar de cada momento, trabajamos, entramos, salimos, se intenta hacer vida normal pero en el fondo, en tu fondo sigue viviendo, alimentando recuerdos, esperanzas estúpidas que sabes vanas, viviendo dentro de ti.
¿Vale la pena tanto esfuerzo, tanto nadar contracorriente de uno mismo?
Supongo que me quedan unos cuantos, quizá cientos de días 11 en los que se me paralice la vida y el alma, en los que no sepa reaccionar, en los que el dolor atenace mi garganta y mis dedos...no debo hacer nada...se supone que es la "medicina" correcta y me dan ganas de no atender a los "galenos"y hacer lo que me dicta el coure, pero ya me cortaron las alas. Ya no puedo volar.

4 comentarios:

Unknown dijo...

Nadar contra corriente, correr por el pedregal, volar sin alas a fureza de ilusión... Y llegar: todo ello es la esencia de vivir.

gaia07 dijo...

Cuando la coexistencia próxima de dos temperaturas diferentes, y el calor latente por condensación en la actividad confrontada de ambos produce el inminente peligro de que el viento provoque un vórtice, resulta muy natural que tengas miedo. Mejor si no vuelas, a estas alturas es preferible correr.

En cuanto a no curarte, el virus puede servirte de vacuna, si lo hacen unos cuantos bacteriólogos porque no tú.

Y bien pensado, el esfuerzo de llevarte la corriente tu misma no es que valga la pena, es que no tienes más coj…., o irte directa al centro del huracán. Tú verás.

Un abrazo.

nexus6 dijo...

"Aferrado a mis recuerdos, construí presas que detuvieron el curso de mi vida. Sentado sobre falsas esperanzas vi como mi mundo fundía en negro."
Un día conocí a alguien que me enseño como romper esas presas que dejaran fluir mi vida, como ponerme de pie y virar mi mundo a colores de esperanza.

Un día alguien me dijo algo así,
"vuelo raso, vuelo alto
no importa, el caso es volar"

Si sientes que no puedes volar,si sientes tus alas rotas, dispón de la fuerza de quien a tu lado, está dispuesto a elevarte.

No importa la altura. Solo el deseo de sentir el vuelo.

Entregaste tu salvoconducto?

Un besote.

:Rk.

Danann dijo...

Si Corsario, pero hay días en los que la ilusión se duerme y cuesta moverse

En fin Gaia, valga la pena o no ciertamente no hay nada más que hacer...en fin

El deseo de sentir el vuelo, ese no lo he perdido Nexus y sé que tengo en quien apoyarme, quien me entienda y sepa darme el empujocillo o el capón en el cogote!!!!
jejejejje
un beso y gracias por estar ahi