un segundo y después ...¿qué?

Él llegó tarde como siempre, pero ella estaba esperandole con una sonrisa, llevaba toda la mañana haciendolo y no pensaba reprocharle nada, sabía que él siempre iba con el tiempo justo y que hacía lo que podia por darle gusto a ella, así que no había nada que decir.
Se saludaron con un beso, el de siempre, y comenzaron a charlar, cosas triviales apoyando el codo en la barra del bar. El llevaba tiempo queriendo decirle algo, algo que llevaba en su interior pero no se atrevia a salir, ella estaba a la espera, sabía que algún día tendrian que hablar de ello.De repente ella empezó a encontrarse mal, se quedó blanca y él le preguntó que le pasaba.

Ella respondió: no sé, estoy mareada
El la miró con ternura : Eso sólo se cura con un beso de amor

La íntentó rodear con sus brazos pero solo abrazó al aire, ella se escabulló sin poder evitarlo, deslizandose entre sus dedos y cayó. El golpe de su cabeza contra el suelo retumbó en el local, las conversaciones se convirtieron en murmullos, el reloj se detuvo. El contempló atónito 3 segundos la cara de ella, su expresión le horrorizó, aquellos ojos tan abiertos en aquel cuerpo inmóvil...se arrodilló y sólo pudo repetir una y otra vez su nombre mientras golpeaba suavemente sus mejillas. La desesperación se apoderó de él cuando notó una mano firme que le tocaba el hombro y le pedía relevo, el cuerpo enorme del guardia de seguridad se interpuso entre los dos...no tardó más de un par de segundos en hacerla reaccionar.
Los corazones latían fuertemente mientras ella se incorporaba con ayuda y pronunciaba su nombre, él se adelantó y la ayudó a levantarse.
Sólo había sido un desvanecimiento pero entendieron que cada segundo de la vida cuenta, cada minuto que dejas pasar se va y la vida a veces da segundas oportunidades, a veces no.





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